La llegada de Reguilón a Miami: ¿Construcción o Circo de Messi?
Inter Miami y el desafío de 2026: ¿El fichaje de Reguilón es una solución o un síntoma?
Aquí no nos vamos a chupar el dedo. La llegada de Sergio Reguilón al Inter Miami no es el gran fichaje estratégico que nos quieren vender. Es un movimiento de emergencia, un parche de lujo para tapar el hueco que deja Jordi Alba y, sobre todo, para seguir alimentando el proyecto que se ha convertido en una franquicia de un solo hombre. Cuando el Inter Miami hace un movimiento de este tipo, no está pensando en la sostenibilidad de la liga ni en el desarrollo a largo plazo. Está pensando en que Messi tenga un compañero de alto nivel en la banda izquierda, cueste lo que cueste y le pese a quien le pese. Este es el ‘Us vs Them’ que se vive en la MLS: Inter Miami contra el resto. Ellos tienen el dinero y la chequera para traer a ‘veteranos’ de Europa que no encajaron en el Viejo Continente, mientras el resto de los equipos se rompe la espalda intentando formar talentos locales. Es un desequilibrio que amenaza la competencia.
El Inter Miami se ha convertido en el ‘dream team’ de los exiliados del Barcelona. Ya se sabía que el gran desafío para 2026 era rearmar siempre en torno a Messi. Pero este rearmado no es una construcción sólida; es una acumulación de piezas que giran alrededor del astro argentino. La salida de Jordi Alba fue un golpe. Él no solo era un lateral izquierdo de calidad; era la conexión con el pasado, el entendimiento perfecto con Messi. Ahora entra Reguilón, un jugador más joven, sí, pero con una trayectoria que genera dudas. ¿Es realmente el jugador ideal para el futuro o solo un ‘parche de lujo’ para mantener el nivel? Este es el dilema. La directiva de Miami está en modo pánico, intentando mantener la ilusión de un equipo invencible que, en realidad, depende de la inspiración de un solo genio. El fichaje de Reguilón es un síntoma de esa dependencia.
Reguilón: ¿Salto de calidad o un ‘fichaje de relumbrón’?
Reguilón llega a la MLS con la etiqueta de ‘jugador de élite’, pero su carrera reciente ha sido de altibajos. Salió del Real Madrid, pasó por el Tottenham, por el Manchester United, y no logró consolidarse en ninguno de ellos. En el futbol mexicano o en la MLS, a este tipo de fichajes les llamamos ‘fichajes de relumbrón’: mucho ruido, mucha expectativa, pero a la hora de la verdad, a veces no rinden lo que prometen. No es lo mismo jugar en la Premier League que viajar de costa a costa en Estados Unidos, con el calor, el horario y la exigencia física de una liga que es subestimada por muchos europeos. Inter Miami está apostando a que Reguilón se adapte rápido y que logre entenderse con Messi, pero el riesgo de que esto salga mal es alto. Si no encaja, la presión sobre el equipo será brutal. ¿Será Reguilón el nuevo “chamba” para Inter Miami, o solo un pasajero más en el circo de Messi?
El problema no es Reguilón en sí mismo; es la estrategia que hay detrás. Inter Miami no está construyendo un equipo, está comprando un espectáculo. La filosofía de ‘rearmar siempre en torno a Messi’ implica que no hay una visión a largo plazo para el club más allá de lo que dure el astro argentino en la cancha. Esto es lo que molesta a los aficionados de otros equipos: la sensación de que las reglas son diferentes para Miami. Ellos no tienen que preocuparse por el tope salarial de la misma manera que el resto; ellos simplemente traen a quien necesitan para mantener contenta a la estrella. Es una competencia desleal. La ‘us vs them’ narrativa se intensifica porque Inter Miami no juega con las mismas reglas que los demás, y el fichaje de Reguilón es la prueba de ello. ¿Qué pasa cuando Messi se vaya? El equipo se desmoronará, dejando una estructura de salarios muy alta y sin un proyecto deportivo sólido.
El desafío de 2026 y el ‘pánico’ de Inter Miami
El desafío para 2026 es el motor de todo esto. Inter Miami quiere llegar a la Copa del Mundo con un equipo competitivo y con Messi en plena forma, o al menos con la ilusión de que lo está. Pero la realidad es que Messi tendrá 39 años para entonces. Construir un proyecto sostenible alrededor de un jugador en el ocaso de su carrera es un acto de fe, o de pánico. El fichaje de Reguilón es un reflejo de ese pánico. Necesitan a alguien que pueda cubrir la banda izquierda de Alba, alguien que pueda correr por los dos, y Reguilón, por su edad, es la opción lógica. Pero esta decisión no es por la salud del club; es por la salud de Messi. Es una inversión de corto plazo que no resuelve los problemas estructurales del equipo. La pregunta es: ¿cuánto tiempo más puede Inter Miami depender de fichajes de último momento para tapar los huecos? ¿No sería mejor invertir en la cantera o en talentos jóvenes que no tienen la etiqueta de ‘ex-europeos’? Parece que no, Inter Miami prefiere seguir con la receta de comprar jugadores ya hechos, en lugar de crearlos.
Este fichaje de Reguilón no es una señal de fortaleza para la MLS; es una señal de debilidad. Demuestra que Inter Miami no puede competir en el mercado de fichajes de manera tradicional, sino que debe recurrir a las influencias de Messi para atraer a jugadores de renombre que de otra manera no vendrían a la liga. El “us vs them” se convierte en “ellos tienen a Messi y nosotros no”. Y Reguilón es un ejemplo de cómo Inter Miami está usando su influencia para desequilibrar la balanza. Es un fichaje que beneficia a una parte, pero que perjudica al conjunto de la liga. La afición mexicana que sigue la MLS con ojo crítico, ve en estos movimientos la prueba de que la liga estadounidense es un “circo mediático” más que una liga de futbol seria. Reguilón es el nuevo malabarista de este circo. Su llegada solo confirma que Inter Miami está dispuesto a sacrificar su futuro por un presente de estrellas. Esto es un error, y Reguilón es el nuevo en el error.






Publicar comentario