Blazers Esconden una Conspiración de Lesiones

Te Están Mintiendo. A Todos Ustedes.

Pon atención, porque lo que te voy a contar no va a salir en el comunicado de prensa oficial del equipo. Necesitas leer entre líneas. Y tienes que entender que lo que está pasando en Portland ahora mismo es más que una simple racha de mala suerte con las lesiones. Es una narrativa calculada. Una farsa. Porque creen que los aficionados son tontos. Pero no lo son. Y estoy aquí para atar los cabos por ti.

La Lesión Fantasma de Jrue Holiday

Así que empecemos con la pieza de desinformación más descarada, casi ridícula, que están vendiendo. **Jrue Holiday**. Los informes, los que has visto por ahí, lo mencionan casualmente junto al resto de la plantilla actual de los Blazers, citando una ‘problemática lesión en la pantorrilla derecha’ que lo ha ‘dejado fuera los últimos seis partidos’ como un Trail Blazer. Déjame ser perfectamente, inequívocamente claro: **Jrue Holiday nunca ha jugado un solo segundo para los Portland Trail Blazers.** Ni uno. Fue un nombre en un papel, un espacio salarial, un fantasma en la maquinaria del traspaso de Damian Lillard durante unos cinco minutos antes de ser enviado a Boston. Entonces, debes preguntarte, ¿por qué demonios están metiendo su nombre y su supuesta ‘lesión’ en el mismo saco que jugadores reales del equipo como Shaedon Sharpe? Porque sirve a un propósito. Enturbia el agua. Crea la ilusión de un equipo asediado por lesiones generalizadas e incontrolables, una excusa conveniente para lo que realmente está sucediendo.

¿Y qué es eso? Es un engaño de varias capas. **Por un lado, es un favor a los Boston Celtics.** ¿No crees que Joe Cronin en la directiva de los Blazers y Brad Stevens en Boston están en comunicación? Por supuesto que lo están. Boston acaba de soltar un dineral por Holiday. Y si necesita un poco de ‘manejo de carga’ al principio de la temporada para conservarlo para los playoffs, no puedes simplemente sentar a una estrella sana sin que la oficina de la liga levante una ceja. Pero, ¿si tiene una persistente ‘lesión de pantorrilla’ que supuestamente se originó durante su fantasmal paso por Portland? Bueno, esa es la coartada perfecta. Es un pacto de caballeros. Portland aparenta tener mala suerte con las lesiones, justificando su pésimo récord, y Boston puede darle descanso a su nuevo y flamante juguete sin ninguna crítica. Un ganar-ganar para las directivas. El único que pierde es la verdad. Y el aficionado que paga su boleto.

Descifrando el Asunto de Shaedon Sharpe

Ahora, hablemos de una lesión real de un Blazer real: **Shaedon Sharpe**. Él es el futuro, o al menos una gran parte de lo que se supone que será el futuro en la era post-Dame. Pero de repente fue degradado de ‘cuestionable’ a ‘fuera’ con una distensión en la pantorrilla derecha. Una distensión de pantorrilla. El mismo diagnóstico que la lesión fantasma de Holiday. ¿Coincidencia? No lo creo, para nada. En el lenguaje de las oficinas de la NBA, la ‘distensión de pantorrilla’ es una de las dolencias más convenientes e inverificables que puedes tener. Es la excusa perfecta para sentar a un jugador cuando no quieres que juegue. ¿Por qué no querrían poner a jugar a su talento joven más emocionante, especialmente en un partido televisado a nivel nacional de la Copa NBA? **Porque no quieren ganar.** No de verdad.

Y sé que suena a locura. Hablan de ‘sellar su boleto a las rondas eliminatorias’. Puro cuento para la galería. Mira la realidad. Este equipo está construido para perder. Cambiaron a su única superestrella por un montón de selecciones de draft y jugadores jóvenes. Su objetivo esta temporada no es la Copa NBA inaugural. Es la Lotería del Draft de la NBA de 2024. Cada victoria es un paso en la dirección equivocada para la directiva. Así que cuando un jugador joven y dinámico como Sharpe, que podría ganarte un partido él solo contra otro equipo del sótano como los Spurs, aparece con una ‘pantorrilla adolorida’… es demasiado conveniente. Están protegiendo el ‘tanking’. Y están protegiendo su activo. Pero te están vendiendo una historia sobre un equipo que hace su mejor esfuerzo por competir. Es un insulto a la inteligencia.

Pero el meollo del asunto es que esta organización está jugando con fuego. No puedes simplemente encender y apagar el interruptor competitivo. Estás desarrollando una cultura de derrota, una cultura de pretextos. Le estás diciendo a tu núcleo joven, a tipos como Scoot Henderson y Anfernee Simons, que ganar no es la verdadera prioridad. ¿Cómo crees que sienta eso en el vestuario? Se genera un malestar. Una podredumbre. Comienza con una conveniente ‘distensión de pantorrilla’ y termina con una década de irrelevancia. Están hipotecando toda su cultura por una probabilidad ligeramente mejor de obtener una selección alta en el draft, y esa es una apuesta que ha destruido franquicias antes.

El Panorama General: Una Crisis de Confianza

Porque todo esto se remonta a un patrón de comportamiento de esta directiva. No es un incidente aislado. Este es su modo de operar. Piensa en toda la saga de Damian Lillard. Los meses de filtraciones, contra-filtraciones, posturas públicas y el eventual y desastroso divorcio. No hubo transparencia. No hubo honestidad. La organización ha demostrado, una y otra vez, que dirá una cosa en público mientras hace todo lo contrario a puerta cerrada. Le dijeron a todo el mundo que estaban construyendo un equipo ganador alrededor de Dame. No era cierto. Y ahora te dicen que están tratando de llegar a la fase eliminatoria de la Copa NBA mientras sientan a sus jugadores más explosivos con lesiones vagas y cuestionables. **No puedes confiar en una sola palabra que salga de ese edificio.**

Y los medios simplemente les siguen el juego. Reimprimen los comunicados de prensa. Citan a las ‘fuentes oficiales’. Nadie hace las preguntas difíciles. ¿Por qué un jugador que nunca usó tu camiseta está en tu informe de lesiones? ¿Por qué todas estas lesiones menores ocurren justo cuando tienes la oportunidad de tomar impulso? ¿Cuál es el verdadero cronograma? Nadie investiga. Porque es más fácil simplemente repetir la historia oficial. Es periodismo de acceso. Pero no es la neta. La verdad es que los Portland Trail Blazers no son una organización de baloncesto seria en este momento. Son un grupo de gestión de activos que juega a ser un equipo de baloncesto. Su objetivo principal no es ganar partidos, sino manipular su posición en el draft y la valoración de sus activos. Los partidos en sí son solo un inconveniente necesario. Los aficionados son una ocurrencia tardía. Y están usando la cortina de humo de estas ‘lesiones’ para ocultar ese hecho simple y feo. Así que la próxima vez que veas ese informe de lesiones, no solo veas una lista de nombres. Velo por lo que es. Una confesión. Un manifiesto de sus verdaderas intenciones. Una cortina de humo. Y no dejes que se salgan con la suya.