El Juego de la Fed es un Fraude para Robarte tu Futuro

El Juego de la Fed es un Fraude para Robarte tu Futuro

El Juego de la Fed es un Fraude para Robarte tu Futuro

Te Quieren Viendo Para Otro Lado

Vamos a dejar algo bien claro. Esos encabezados que parpadean en tu celular sobre los “bonos del Tesoro de 10 años” y la especulación de si la Reserva Federal de Estados Unidos (la Fed) bajará las tasas de interés no son más que un truco de magia. Pura distracción. Es un juego de “dónde quedó la bolita” con billones de dólares, y tu futuro es esa bolita. Quieren que te estreses por los puntos base y los nervios del mercado. ¿Por qué? Porque mientras te tienen hipnotizado viendo una mano, con la otra te están vaciando los bolsillos. Y llevan más de un siglo haciéndolo.

Toda esta conversación es un fraude. Una farsa total. Hablan de la inflación como si fuera un desastre natural, un huracán que apareció de la nada en el Golfo. Un monstruo que ahora, como héroes, deben aniquilar por nuestro propio bien. ¡Pamplinas! Ellos crearon al monstruo. Lo alimentaron, lo cuidaron y lo soltaron con años de imprimir dinero de la nada para rescatar a sus cuates de Wall Street y para financiar sus guerras interminables. Imprimieron billones. Billones. Y ahora tienen el descaro de mirarte a los ojos y decirte que debes pagar el precio. Que el interés de tu crédito hipotecario tiene que duplicarse, que el pago de tu coche tiene que irse a las nubes, que la deuda de tu tarjeta de crédito debe volverse un infierno sin salida. Todo para arreglar el problema que ellos mismos provocaron.

El “Super Peso”: ¿Milagro o Espejismo?

Mientras tanto, en México, nos venden la historia del “super peso”. Nos dicen que es una señal de la fortaleza de nuestra economía. ¡No te chupes el dedo! La fortaleza del peso no es más que un reflejo directo de las altas tasas de interés de la Fed. Ese dinero que entra al país es capital “golondrino”, pura especulación que busca rendimientos rápidos. No es inversión productiva. Y es un arma de doble filo que nos está matando silenciosamente. ¿A quién le pega duro un peso fuerte? A los exportadores mexicanos, que reciben menos por sus productos. Y sobre todo, le pega a las familias que viven de las remesas. Cada dólar que sus familiares se parten el lomo por ganar en Estados Unidos rinde menos pesos. Están devaluando el sacrificio de millones de mexicanos. Es un espejismo que beneficia a los especuladores financieros mientras ahorca a la gente trabajadora.

El Banco de México (Banxico) no tiene opción. Está con la espalda contra la pared. Se ve forzado a seguirle el paso a la Fed, subiendo sus propias tasas para evitar una fuga masiva de capitales que haría colapsar al peso. ¿Qué significa eso? Que nuestra política monetaria no es soberana. Es un eco de las decisiones que toma un puñado de banqueros no electos en Washington. Nos importan su inflación y luego nos recetan su “cura”, que para nosotros es veneno: crédito caro que frena la inversión, asfixia a las PYMES y le pone el pie en el cuello a cualquiera que quiera comprar una casa o un coche. Es un desmadre. Perdemos si el dólar sube, y perdemos si el peso se “fortalece”. El sistema está diseñado para que perdamos siempre.

Un Siglo de Engaños con Sabor a Imperialismo

La historia no miente. No es la primera vez que las decisiones de Estados Unidos hunden a México. Recordemos el “Efecto Tequila” de 1994, una crisis brutal detonada por una subida de tasas de la Fed. Lo que vemos hoy es la misma gata, nada más que revolcada. Usan una retórica diferente, pero el resultado es el mismo: la riqueza se concentra en el norte, en los centros financieros globales, mientras que países como el nuestro pagan los platos rotos. La Fed no es un simple banco central; es el ejecutor del poder financiero del imperio, y sus políticas son una herramienta para mantener la hegemonía del dólar y disciplinar a las economías emergentes.

Ellos cortaron el lazo del dólar con el oro en 1971, y ahí fue cuando el casino se descontroló por completo. Se liberaron de la realidad. Libres para imprimir y manipular sin límites. Libres para crear las burbujas grotescas y las crisis devastadoras que han definido nuestras vidas. Y en cada ciclo, la misma jugada: dinero fácil para los ricos, austeridad y dolor para los pobres. La inflación no es un accidente, es el mecanismo. Es un impuesto silencioso que te roba poder de compra año con año, no por casualidad, sino por diseño.

El Objetivo Final es el Control Total

Entonces, ¿a dónde nos lleva todo esto? ¿Cuál es el acto final? No se trata de otra crisis cíclica. Es algo mucho más grande. Han llevado este sistema basado en deuda hasta su límite matemático. Ya es impagable. Un colapso es inevitable, pero no le temen. Al contrario, lo esperan con ansias. Porque del caos, planean presentar su “solución”.

La llaman Moneda Digital de Banco Central (CBDC). Suena moderno, ¿verdad? Es el Caballo de Troya. Es el fin de la libertad financiera. Una CBDC es dinero programable controlado por ellos. Significa que tendrán una ventana directa a cada transacción que hagas. Cada café, cada libro, cada donativo. Todo registrado y monitoreado. ¿No les gusta lo que haces? Simplemente te apagan el dinero. Podrían ponerle fecha de caducidad a tus ahorros para obligarte a gastar. Podrían bloquearte la compra de gasolina o de un boleto de avión. Es la herramienta definitiva de control social. Una prisión digital que te venderán como progreso. No caigas en la trampa.

La pelea por los bonos del tesoro es el circo. La verdadera guerra es por tu soberanía y tu libertad. Están provocando una crisis tan grave que les rogarás que te salven con sus cadenas digitales. La elección es simple: despiertas ahora, o despertarás en una jaula. Infórmate. Entiende qué es el dinero. Ve el sistema como la máquina depredadora que realmente es. Porque ellos, los banqueros de la Fed y sus cómplices en Wall Street, no son tus amigos. No cuidan de ti. Son el adversario. Y vienen por todo lo que tienes.

El Juego de la Fed es un Fraude para Robarte tu Futuro

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